El sistema esquelético-muscular es una integración compleja de los huesos, cartílagos, ligamentos unidos en las articulaciones, los músculos y sus tendones. Asegura el sostén, movimiento, y protección del cuerpo del animal. Lejos de ser una función solo mecánica, el sistema óseo regula los niveles del calcio y minerales, y se encarga de la formación de glóbulos rojos y células de defensa de la sangre. Protege y contiene los elementos sistema nervioso central, cerebro y medula espinal, por lo que de él dependen en parte todos los procesos mentales necesarios para comprender y responder a la información que recibe el animal desde el exterior, gracias a la dirección por transmisión de impulsos que mantienen de los procesos vitales (Frecuencia cardiaca, respiración entre otros), y hacia los nervios y los músculos dirigiendo los movimientos. Es pues indispensable para la salud mental y física del animal.
Surge la posibilidad y utilidad de la Medicina Antizootóxica, rama de la Medicina Veterinaria que utiliza medicamentos y sustancias de origen natural en microdosis. Por ello son seguros, libres de efectos secundarios y complicaciones, pudiéndose utilizar por tiempos prolongados en prevención y tratamiento de diversas enfermedades osteomusculares. Mejora la calidad de la estructura y facilita la recuperación y crecimiento óseos protectores del vital sistema nervioso, regula los niveles de calcio y minerales indispensables para la formación de los huesos, los dientes y la contracción muscular, la coagulación de la sangre y las enzimas necesarias para el metabolismo. Optimiza la estructura, función muscular, resistencia y recuperación de la fatiga del deportista, siendo libre de dopaje por regulación de los procesos metabólicos de producción de glucógeno, energía y eliminación de ácido láctico por el hígado. Estimula la función del sistema inmune y oxigenación de todo el organismo al regular la producción de glóbulos rojos y línea blanca celular. Regula el funcionamiento hepático productor de energía ATP y la reutilización del ácido láctico, causa de la fatiga, en glucógeno.
La Terapía Antizootóxica integral debe acompañarse de una nutrición adecuada con suministro de calcio y minerales para la buena formación ósea, proteínas para el desarrollo muscular, carbohidratos y lípidos para la producción de glucógeno y reconversión de ácido láctico en el Hígado para recuperación post-ejercicio. El exceso de calcio, práctica habitual por falta de guía de su Médico Veterinario, lejos de mejorar la estructura ósea afecta su resistencia pues se acumulará en él y se fracturará con facilidad.
El ejercicio regular,2 paseos de 45 minutos al día, además de mantener la estructura osteomuscular sana y de alta movilidad, elimina el estrés pues se produce una hormona, la serotonina. Los medicamentos Antizootóxicos regulan el sistema nervioso, facilitan el aprendizaje, ayudan a controlar el estrés y la adaptación. Los paseos cortos solo servirán para hacer necesidades fisiológicas, pero no para eliminar el estrés de confinamiento y falta de actividad. La actividad física es ideal durante el día, pues el Sol y la vitamina D son indispensables para la fijación de calcio, el crecimiento y mantener los huesos fuertes. La mayor fuente de producción de esta vitamina es la piel, y es solo activada por la exposición a los rayos solares.
En conclusión, la Medicina Antizootóxica protege y mantiene de forma segura y natural el sistema osteomuscular y optimiza la utilización de los nutrientes de la balanceada alimentación en minerales, proteínas y carbohidratos recetada por su Médico Veterinario. El ejercicio periódico 2 veces al día mejorará la movilidad y controlará el estrés que genera daños en casa, malos hábitos de micción y deposición, así su mascota tendrá una salud física y mental integral
Hugo Leiva K.
Director científico.
Línea veterinaria LHA